Semana del Niño 2017

Desde hace ya unos cuantos años, el primer fin de semana de agosto se celebra la semana del niño en el pueblo de Añavieja. Son unos tres o cuatro días en los que se realizan diversas actividades dirigidas a los niños y niñas de nuestro pueblo. No importa la edad, todos están más que invitados a disfrutar de esos días. Este año se ha celebrado desde el miércoles 2 hasta el domingo 6 de agosto. El tiempo nos acompañó, así que pudimos disfrutarlo mucho más. Quiero agradecer la ayuda de todos los padres y madres, ya que sin ellos no podría haber sido posible, así como a las tres azafatas: las dos Marías y Andrea. Muchas gracias.

El miércoles por la tarde comenzamos con una actividad para todos en el patio de las escuelas. La actividad consistía en realizar sales de colores, así que los chicos y chicas nos ayudaron a colocar las mesas y bancos en el patio y a repartir el material entre todos y todas. Pude contar con la ayuda de las chicas mayores: las dos Marías y Andrea, y algunas madres y padres, una suerte, la verdad… Ellas estuvieron atentas de que a nadie le faltara material. Cada uno tenía un pequeño bote de cristal y tenía que ir decorándolo con la sal previamente pintada con tizas.  Esta actividad es fácil y muy buena para la motricidad fina y la imaginación. Estuvieron muy entretenidos y yo creo que se lo pasaron muy bien. Una vez terminada la actividad, les explicamos que a la mañana siguiente íbamos a realizar un gynkana por todo el pueblo, e hicimos los equipos: verde, azul y rojo, así que cada uno tenía que traer una camiseta con el color que le había tocado. La actividad comenzaba a las 11 de la mañana por lo que debían ser puntuales.

El jueves a las 11 de la mañana comenzábamos nuestra gran gynkana, con la ayuda de “las chicas” y de algunos padres y madres que se ofrecieron a ayudarme. Cada equipo venía bien equipado con su camiseta. El día anterior, “las chicas” habían escondido en varios sitios de pueblo las pistas para poder realizar las actividades, que eran muy variadas: realizar mímica para adivinar películas, inventarse una canción con una serie de palabras que les dimos, contestar preguntas sobre el pueblo y su historia, pasarse un huevo de uno en uno a través de una cucharilla, coger una manzana en un balde lleno de agua…. Fueron unos campeones porque la verdad es que hacía calor y realizaron todas las actividades con muchas ganas. Por la tarde decidimos hacer una guerra de agua con globos, pistolas, y lo que cada uno quisiera. También se dieron unos baños en la piscina.

El viernes, teníamos la excursión, cogíamos el autobús que nos llevaba a Noviercas, población cercana a la nuestra. Allí nos enseñaron el pueblo, y el museo de Gustavo Adolfo Bécquer donde se explica la vida que tuvo, ya que pasaba temporadas allí, donde nacieron dos de sus hijos.  De ahí nos dividimos en dos grupos, uno fue a visitar el monumento más icónico que tiene que es una importante torre árabe del siglo X. La guía nos explicó que desde la torre se permitía la comunicación con el resto de las torres de la comarca. Mientras tanto, el otro grupo visitaba el resto del pueblo, el albergue, la iglesia….

Mientras esperábamos el autobús que nos llevaba al sitio donde íbamos a comer, pudimos almorzar y tomar un refresco en el bar del pueblo. Seguidamente llegamos a nuestro destino, donde comimos en un refugio que pertenece al pueblo de Noviercas y está al lado de la ermita. La verdad es que estuvimos de lujo, había mesas, bancos, agua y, sobre todo, se estaba bien fresquito con el calor que hacía. Una vez terminaron de comer, los niños y niñas se fueron al río y se lo pasaron en grande. Más tarde regresamos a Añavieja, donde había concurso de pizzas y bizcochos. Los mismos equipos que habían realizado la gynkana tenían que hacer dos pizzas y un bizcocho para cenar. Les dimos todos los ingredientes y allí empezaron a echarle imaginación para la decoración de la cena. Lo hicieron de maravilla y pudimos cenar en la plaza porque hacía muy buena noche.

El sábado fue el día para preparar las funciones de la tarde. Durante toda la semana los diferentes grupos preparan teatros y bailes gracias a la gran ayuda de M.ª Pili, que con toda su paciencia busca diferentes teatros para todos los niños y niñas, dándole su toque para que todos puedan participar. Los niños lo trabajan mucho, aprendiéndose los papeles, preparando los escenarios…. ,¡son unos artistas! Las funciones son el sábado por la tarde y está invitado todo el pueblo en la plaza, así que es una gran cita, ya que son obras muy divertidas y la gente del pueblo está deseando verlas. Como siempre, fue un gran éxito. Desde aquí quiero agradecerle a M.ª Pili todo su esfuerzo y dedicación y ofrecer un gran aplauso a todos los participantes que, como siempre, lo hicieron de maravilla.

La tarde del sábado también se utiliza para preparar el campamento en el campo de fútbol que hay al lado del frontón. Cada familia baja su tienda de campaña, colchones, colchonetas…, todo lo necesario para dormir esa noche al aire libre. Esto les gusta mucho. Después del teatro se baja al campo de fútbol, donde cada uno lleva cosas para cenar y beber. Este año hacía mucho frío, así que no pudimos disfrutar mucho. Esa noche no se duerme mucho, ya que todos están yendo por todas las tiendas, esa es su diversión. Por la mañana desayunan chocolate calentito y recogen el campamento. Más tarde se hace un partido de fútbol en el que participa todo el que quiera y después se termina con una comida con todos en las escuelas.

Este ha sido el resumen de 5 días intensos de actividades, cuyo objetivo es la participación de todo el mundo. Es una suerte poder contar con las ganas y la ayuda de todos y todas, es un lujo.

Muchas gracias a todos y todas.

Un saludo